La verdad sobre la limpieza de los suelos de tarima.
Cuando se trata de mantener en perfecto estado los suelos de tarima y parquet, es común encontrarse con una serie de creencias populares que, lejos de ayudar, pueden resultar perjudiciales. Vamos a desmontar algunos de estos mitos para que puedas disfrutar de tus suelos de madera con tranquilidad y conocimiento.1.- Limpiar y limpiar: el mito de la limpieza excesiva.
Es cierto que la limpieza es una parte esencial en el proceso de cuidado y mantenimiento de los suelos de tarima, sobre todo para evitar que estos suelos se rayen o vayan perdiendo el aspecto inicial. Pero utilizar productos químicos agresivos o agua en exceso para conseguir una limpieza máxima puede dañar la capa protectora del suelo y provocar desgastes prematuros. Opta por productos de limpieza específicos para suelos de madera y utiliza una cantidad adecuada de agua para evitar problemas.2.- Nunca le hace mal: el mito del agua como aliado.
Otro falso mito común es el uso excesivo de agua para limpiar. Algunos creen que la madera necesita una buena dosis de agua para mantenerse en buen estado y que el agua, como tal, nunca puede hacerle mal. Nada más lejos de la realidad. El exceso de humedad puede hinchar y deformar la madera, así que optar por un trapo ligeramente húmedo siempre será más adecuado. En todo caso, sigue las instrucciones de los fabricantes e instaladores de tu suelo de madera, sea maciza o laminada.3.- Encerar los suelos: el mito que cambia según quién te lo cuente.
Existe la creencia de que encerar el suelo de madera es indispensable. De la misma forma, otras personas te dirán lo contrario: que no es conveniente abusar de la aplicación de cera. Y lo cierto es que en ambos casos hay mucha razón porque encerar un suelo de tarima no es indispensable (ya que, hoy en día, muchos suelos cuentan con capas protectoras que hacen que la cera sea innecesaria), pero tampoco está mal hacerlo de vez en cuando para proteger y darle un brillo natural a los suelos. Utilizar cera de forma indiscriminada puede dejar un residuo pegajoso y difícil de limpiar, pero sí puede estar bien hacerlo de vez en cuando y con productos recomendados. Eso sí, antes de encerar, verifica las instrucciones del fabricante y considera la posibilidad de utilizar productos específicos que mantengan el brillo natural del suelo.4.- Aplicar vinagre a los suelos: el mito del limpiador universal.
El vinagre es un limpiador popular en muchos hogares, pero en el caso de la limpieza de suelos de tarima y parquet puede resultar contraproducente, sobre todo en los de madera maciza, ya que se come el tono de la madera. Además, el vinagre es ácido y puede dañar el acabado de la madera, dejando marcas irreparables. Como siempre te decimos, opta mejor por productos de limpieza específicos para suelos de madera para evitar sorpresas desagradables. El uso del vinagre viene bien a otro tipo de suelos de base mineral o sintética como los de terrazo, que consigue limpiarlos sin que se estropee como puede ocurrir con los de madera.5.- No usar robots de limpieza: el mito del que ya te hemos hablado.
Como te contamos hace un tiempo en este artículo, los robots de limpieza (tipo Roomba o Cecotec) pueden usarse perfectamente en suelos de madera y tarima. Siempre que se trate de suelos de madera o tarima laminada de calidad AC4, AC5 y AC6 o de tarima vinílica, no habrá ningún problema con el uso de estos pequeños electrodomésticos. Olvídate de este falso mito y no dudes en usar este aparato, pero siempre comprueba las indicaciones del fabricante tanto del pavimento como del robot de limpieza.
En resumen, mantener tus suelos de tarima en perfecto estado no requiere grandes esfuerzos, pero sí no caer en los falsos mitos populares. Cuando instalamos tarima laminada en Madrid insistimos mucho a nuestros clientes que, ante la mínima duda a la hora de actuar sobre los suelos, nos consulten. Con un enfoque cuidadoso, información veraz, productos específicos y un conocimiento adecuado, podrás disfrutar de la belleza natural de tus suelos de madera sin preocupaciones. ¡Cuida tus suelos como se merecen!
