Principales ventajas de los suelos laminados
¿Sabes cuales son las ventajas de los suelos laminados y que los suelos laminados se inventaron en la década de los 70? La primera marca que comercializó estos pavimentos en Europa fue Pergo, en los años 80. De hecho, hoy en día, se sigue empleando su nombre para referirse a estas tarimas, a pesar de que hay muchas más firmas que se dedican a su comercialización. Como punto de venta de tarima flotante queremos presentarte los principales beneficios de esta solución para pavimentos.
En Acron Tarimas sabemos bien que una de las dudas más frecuentes que suelen tener nuestros clientes es cuál es la diferenciación entre suelos laminados y tarimas naturales, podemos decir que los últimos son de madera, mientras que los primeros responden a una variedad sintética fabricada, imitando la apariencia de la madera.
Obviamente las tarimas laminadas resultan mucho más asequibles, que los suelos de madera natural. La alternativa sintética consigue unos acabados de calidad que simulan tarimas de maderas nobles a un precio mucho más asequible y que de ser de madera tendrían un precio realmente desorbitado.
Otra ventaja de las tarimas laminadas es que están especialmente tratados, son fáciles de instalar y suponen una solución muy adecuada para diferentes superficies. De hecho, las tarimas ignífugas se pueden instalar en zonas húmedas como la cocina o el baño. Este tipo de suelos es tendencia absoluta en interiorismo. Además, no serán necesarias obras y podremos evitar las molestias propias de una instalación más compleja.
Desde nuestra experiencia en la venta de tarima flotante conocemos los diversos beneficios de estos pavimentos, pero también te contamos un secreto para disfrutarlo, deberás elegir el tipo de suelo que mejor se adapte a tus necesidades. Aprovechando que estas tarimas son más económicas, podemos optar por la perfección. Debemos tener en cuenta el tipo de tratamiento de estos suelos, el grosos de los tableros o el sistema de unión entre ellas.
En cuanto a la apariencia de los suelos sintéticos se asemejan a los pavimentos naturales de maderas como nogales o wengés, no sólo a la vista, sino también al tacto y al oído. Esta alternativa es realmente silenciosa, por su sistema de instalación y de unión que permite que estos pavimentos absorban el ruido propio de la pisada.
